Enclavada al pie de las montañas fronterizas entre Austria y Alemania, donde los Alpes empiezan a perder altura y se abren las llanuras que conducen hacia Viena, la “Ciudad de la Sal” (ese es el significado de su nombre, originario del antiguo negocio minero de la zona) se ha convertido en uno de los lugares del mundo más vinculados con la música.
Wolfang Amadeus Mozart, quizás el más grande compositor de todos los tiempos, nació y vivió aquí. Su figura es omnipresente en todas las tiendas de souvenirs y el turista no puede evitar imaginárselo paseando por sus calles barrocas.
Pero además Salzburgo es también la ciudad de ‘Sonrisas y Lágrimas’, el archiconocido musical con cuyas canciones crecieron miles de niños y que eligió esta joya para varias de sus localizaciones.